
Somatización: cuando el cuerpo expresa el sufrimiento de la mente
Seguro que alguna vez has sufrido algún dolor físico que no aparenta tener una causa identificable, y que con el tiempo ha remitido, o tras varias pruebas médicas te han confirmado que no tiene causa física, sino psicológica.
A este tipo de sintomatología se le llama somatización. Lo podríamos definir como la expresión física del malestar psicológico, que nace de un estado ansioso que se mantiene en el tiempo y que es provocado por problemas emocionales intensos. Todo ello interfiere negativamente en la vida social, laboral e incluso personal de quien lo sufre.
¿Cuáles son los síntomas?
Los síntomas de un trastorno de somatización pueden ser muy variados, ya que afectan a cada persona de forma distinta. Los más frecuentes suelen ser:
- Cefaleas/dolores de cabeza
- Dolores musculares: contracturas, dolor articular, cansancio generalizado, etc.
- Alteraciones cardio-respiratorias: dificultades para respirar, dolor en el pecho, taquicardias, etc.
- Problemas gastrointestinales: voitos, diarreas, estreñimiento, dolor estomacal, etc.
- Problemas sexuales: dolor en las relaciones sexuales, disfunción eréctil, menstruaciones dolorosas o irregulares, etc.
¿Qué personas tienen más predisposición a padecer somatizaciones?
Todos podemos sufrir en algún momento algún síntoma somático; aun así, existen ciertas situaciones y rasgos de personalidad que precipitan la aparición de somatizaciones.
- Altos periodos de ansiedad y estrés
- Vivencias traumáticas
- Personas con trastornos psicológicos de larga evolución como depresión y/o ansiedad
- Personas con específicos rasgos de personalidad. Sus síntomas somáticos actúan como una llamada de atención para solicitar ayuda emocional
- Negativas, pesimistas y/o catastrofistas
- Reactivas, muy emocionales
- Dependientes de sus relaciones y del apoyo emocional que reciben
- Inseguras
- Con afán de protagonismo, egocéntricas y/o manipuladoras
- Con dificultades de gestión emocional
- Con tendencia a ser obsesivos e hipervigilantes
Es muy habitual que las personas que sufren síntomas somáticos no sean capaces de identificar ni reconocer que su problema tiene base psicológica y por ello viven y expresan sus síntomas de forma insistente y dramática.
Tratamiento
Las personas que llegan a consulta refiriendo problemas somáticos lo suelen hacer derivados de los servicios de atención médica tras descartar cualquier causa médica. Suelen estar agotadas de buscar el origen de sus problemas y no comprenden muy bien por qué su cuerpo se comporta así.
En el tratamiento es muy importante identificar los desencadenantes del estado psicológico de la persona. Se debe explorar el área personal, laboral, familiar, de pareja, etc., para llegar a detectar qué origina y mantiene los síntomas, así como a enseñarle al paciente a aplicar nuevas estrategias de gestión de sus emociones y de resolución de problemas.
Si reconoces alguna de las características mencionadas con anterioridad o conoces a alguien que pueda presentarlas, no dudes en ponerte en contacto con nosotros y desde nuestro centro de psicología y psiquiatría Psicosabadell te asesoraremos de la mejor forma posible.
Marta Farré
Nº Col. 23.251