Afectación de la violencia intrafamiliar en los niños
¿Qué es la violencia intrafamiliar?
La violencia intrafamiliar se define como todas aquellas manifestaciones de maltrato y abuso en el núcleo familiar. Habitualmente, constituye un perfil de agresor que incluye: baja autoestima, pocas habilidades de gestión emocional, intolerancia y uso de la violencia como herramienta de poder/control.
Se conoce que en los menores de 15 años, gran parte de la violencia sufrida proviene de la familia. La violencia en el núcleo familiar ha conseguido que aumente el número de personas con heridas emocionales y generar un rechazo hacia los familiares.
Evolución de la violencia intrafamiliar
- Etapa I (Tensión). En esta etapa el agresor suele buscar imponer tensión en el ambiente para afianzar su posición de superioridad con respecto a sus víctimas (que en este caso serían los niños). Esta etapa se caracteriza por la presencia de un marcado maltrato verbal y psicológico.
- Etapa II (Agresión física). En esta fase el agresor pierde el control de sus emociones por algún motivo aleatorio y descarga todas sus frustraciones y negatividad sobre su víctima. Los episodios de violencia pueden incluir (o no) agresión física independientemente de esto, el afectado queda asustado y confundido.
- Etapa III (Arrepentimiento). En esta etapa, el agresor trata de ofrecer disculpas y demostrar arrepentimiento por el daño causado. Sin embargo, no rectifica su comportamiento realmente.
Cabe destacar que estas etapas pueden repetirse una y otra vez en el tiempo, con lo cual se profundiza una relación tóxica y un círculo vicioso de violencia intrafamiliar.
Consecuencias de la violencia intrafamiliar en niños
- La secuela más común de la violencia intrafamiliar en niños es la adopción del comportamiento violento como mecanismo de defensa.
- Además se observan consecuencias físicas como: insomnio, molestias estomacales, dolor de cabeza, pérdida de control de los esfínteres…
- Emocionalmente muestran sentimientos de culpa, sintomatología depresiva y/o ansiosa, aislamiento, irritabilidad y baja autoestima.
- Naturalmente, el rendimiento académico resultará afectado y los niños pueden presentar una notable bajada en las notas escolares.
Es un compromiso social ayudar a detener y prevenir la violencia intrafamiliar. La primera medida para detenerla es reconocer la problemática a la que se está expuesto. Posteriormente, buscar ayuda ante un servicio público.
Hay que tener presente que un ambiente familiar sano puede ofrecer un desarrollo emocional sano para los niños. Es importante educar en respeto y en valores.
Desde Psicosabadell, disponemos de un equipo multidisciplinar con especialistas en psicología infanto-juvenil que os ayudarán a detectar, prevenir e intervenir en estos casos. Como centro especializado en intervención EMDR trabajaremos las vivencias traumáticas que ya se han dado para que el niño/a pueda superar la experiencia negativa y favorecer un correcto desarrollo intentando que la secuela de lo vivido quede minimizada.
Raquel Bello Porcel
Psicóloga General Sanitaria
Nº Col. 25124